domingo, 3 de octubre de 2010

'Hilo Musical', siempre disfrazados



Echo un vistazo a las novedades de la editorial Alpha Decay y elijo 'Hilo Musical' de Miqui Otero. Me llama la atención que una novela se califique como “Pop”.
Busco el significado de Pop en el diccionario de la R.A.E. y termino aún más confundida. Encuentro dos definiciones:
1. Se dice de un cierto tipo de música ligera y popular derivado de estilos musicales negros y de la música folclórica británica.
2. Se dice de una corriente artística de origen norteamericano que se inspira en los aspectos más inmediatos de la sociedad de consumo.

Creo que lo mejor será rendirme ante la curiosidad y devorar la novela.
Mientras escucho el último álbum de Everything Everything, 'Man Alive', me adentro en 'Hilo Musical'. Primero me sitúo en las puertas de “Villa Verano”, un parque temático repleto de individuos disfrazados de animales o de personajes de cómic, no sé muy bien si para ocultarse o para mostrarse tal y como son.

Sigo caminando por esta especie de “zoológico” hasta acompañar a Tristán, a veces Tristón o Tritón, a realizar una entrevista para trabajar en Villa Verano; porque desea “trabajar disfrutando”; ¿paradoja?
Pasada la entrevista sin ninguna dificultad el protagonista obtiene su disfraz y pasa a formar parte de este escenario que compondrá un intenso capítulo de su vida.
La música está muy presente en la novela, a través de recuerdos de su infancia como la cinta de las rápidas y las lentas o en múltiples conversaciones con otros personajes.

No puedo evitar pensar en una versión moderna del esperpento de Valle Inclán, un parque temático que simula un espejo donde se refleja la sociedad actual deformándose, donde cada habitante tiene su disfraz y como dice en una de las páginas del libro:
“…siempre estamos disfrazados, así que a veces tenemos que disfrazarnos para mostrarnos como somos…”
Veo un adolescente que se niega a pasar a la madurez, una burla a los tópicos, un micro-mundo convertido en parque de atracciones donde todo es mentira, metáforas, guiños al lector, melancolía, miedo a crecer… Una forma diferente de hacer una caricatura de la realidad a través de la escritura.

Os dejo un fragmento:
“…Todo tiene que ser como un eco, un rastro de carmín en un espejo después de una batalla en la cama. Algo que la gente tenga que explicarse por partes y reconstruir, y que esa reconstrucción, con suerte, deforme todo hasta que parezca más grande, hasta que la sombra del recuerdo sea mucho mayor que lo que ha sucedido en realidad. Por eso es importante que no se vean las caras.
Se palpa el mejor sentimiento posible: el pálpito de la emoción, la intriga de las premoniciones. Todo el mundo está como loco…”


* HILO MUSICAL de Miqui Otero - Ed. Alpha Decay 19 €

No hay comentarios:

Publicar un comentario