Cuarto disco, en toda regla, de Joël Iriarte. Esta vez con Canada, la productora barcelonesa creada por Luis Cerveró, Nicolás Méndez y Lope Serrano que el pasado año nos deleitó con auténticas joyas en forma de vídeoclips. Editado en formato CD-Digipack y LP-Vinilo el pasado mes de febrero, está compuesto por 12 cortes, incluyendo cuatro de nueva factura. Regrabando también cuatro temas de su primer y aclamado disco, 'Supercrepus', así como del segundo, 'Escuela De Zebras'.
Las ocho canciones revisitadas destilan un nuevo aroma, unos nuevos matices que antes no habíamos sido capaces de discernir. Joël ha estudiado y mejorado su capacidad vocal, y eso se nota a la hora de regrabar las voces.
Joe Crepúsculo, natural de Sant Joan Despí, adquirió un súbito e innegable estatus de formidable autor de canciones pop. Con inesperadas letras y recondas melodías consiguió que, para muchos, el adjetivo 'crepuscular' adquiriera una nueva connotación.
En tan curioso repertorio, no es de extrañar que los nuevo temas interactúen tan a la perfección con el viejo catálogo. Ninguna del penúltimo disco, 'Chill Out', se deja ver versionada en este 'Nuevo Ritmo'. Pero no es ningún recopilatorio con añadidos, sino un disco de los pies a la cabeza, el cuarto ya, ensamblado con nuevas y primigenias piezas.
'Nuevo Ritmo' y nueva voz, porque sin desvirtuar su desgarbada impronta, Joe Crepúsculo ha mimado cada interpretación. Como cantante ha ganado enteros de la noche a la mañana. Y como autor sigue redescrubriéndonos cosas que teníamos ante nuestras narices y no veíamos.
Sin miedo a los fantasmas de las versiones anteriores, Joe Crepúsculo (o Joël Iriarte, como prefieran) se reinventa con el productor Sergio Pérez (guitarrista y componente también de Thelemáticos y Anticonceptivas) ya en un rol de igual a igual. Pero además, como si de un grupo ocasional se tratara, ahí están Jordi Irizar dándolo todo a la batería y El Guincho haciendo lo propio a la percusión. Luciana Della Villa (de Sibyl Vane) a los coros, Jens Neumaier (de 12twelve) al saxo, Maik Alemany (de Giulia y los Tagliarini) a las trompetas y el charango y Edu Pozo (de Za!) al clarinete. Y Joe, además de cantar, al bajo, al piano y esos sintetizadores como de restaurante chino.
Adiós a la hegemonía estadounidense o británica y hola a América en toda su extensión. El country, el swing, el muro de sonido 'spectoriano' y el rockabilly dan la mano a la samba, bachata, bossa nova, reggaeton, la ranchera, los ritmos andinos o la cumbia villera. Joe Crepúsculo extendiendo su radio de acción al mundo con un disco repleto de 'sus cosas buenas'.
Artículo de Luis Troquel editado por RadioDuo.
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